Un experimento que trae nuevas normas y supuestos estímulos, tanto económicos como fiscales para los choferes por cuenta propia, específicamente quienes se dedican a laborar en el transporte de pasajeros, mejor conocidos como boteros, fue implementado este lunes por parte del Consejo de la Administración Provincial de La Habana, dice un reporte del medio digital independiente 14yMedio.
Según amplía el sitio, a partir de este 8 de octubre, los conductores deben acudir a las oficinas municipales que se encargan de tramitar los permisos de trabajo que son por cuenta propia, y con ello pedir una nueva licencia operativa. Para adquirirla, es importante llenar un contrato con las entidades estatales para obtener el combustible y los datos de una cuenta bancaria.
Los choferes podrán obtener accesorios, herramientas y piezas para sus vehículos en un mercado mayorista a precios con un 20% más bajos, una vez que ya hayan realizado dicho trámite. Sin embargo, la mayoría de los boteros no están contentos con esta nueva modalidad, ya que dudan acerca de que los comercios estatales puedan proveer las partes más necesarias de sus automóviles, la mayoría de fabricación estadounidense.
Este nuevo experimento se implementará durante cuatro meses en la capital cubana.
Hasta el momento la incorporación de transportistas de autos y microbuses (cuya capacidad es de 4 a 14 pasajeros) es de manera voluntaria, según reveló la prensa oficial, citada por 14yMedio.
Los boteros, como el resto de los trabajadores cuentapropistas, no tienen un sindicato que los respalde para plantar cara al Gobierno, además del miedo que infundan las autoridades bajo amenazas de poder perder sus licencias. No obstante, el enojo ante tal situación ha orillado a la mayoría de los que conforman este sector, y un gran número a convocado a iniciar este martes un discreto paro laboral, informa el sitio independiente cubano.
Marta Oramas, viceministra del Transporte, dijo que con esta nueva modalidad se busca obtener un equilibrio entre “los intereses de la población, asociados a precios más asequibles y seguridad”, y los conductores, “para que no vean menguados sus ingresos y accedan a facilidades con los insumos”.
Un jubilado entrevistado por 14yMedio comentó al respecto: “Cada vez que implantan una de estas medidas pasan dos cosas: o somos los pasajeros los que pagamos los platos rotos o que en poco tiempo ya nadie respeta lo estipulado. ¿Vamos a ver qué va a pasar en este caso?” además, añadió en forma de protesta: “Los precios como están no se pueden quedar, porque no puede ser que yo pague a un botero por una ruta más que lo que gano en un día de pensión, pero tampoco el Estado logra hacerlo mejor”.
Con esto se busca acabar con el extenso mercado informal que se fortalece con el combustible robado a las entidades estatales. Los conductores privados deberán también cumplir con consumos mínimos y según el tipo de vehículo, su capacidad y la clase de combustible que utiliza. En el cálculo de la gasolina o el diésel entrará también la variable de la ruta que han estipulado previamente con la empresa estatal de transporte.
Este lunes se establecieron 26 terminales y 23 rutas asociadas, en las cuáles no podrán maniobrar los boteros. Abigail Pacheco, de 56 años comento al respecto “Eso nos quita movilidad y autonomía, sin dudas” “Ahora será una infracción si nos vamos por una calle que no está establecida o si usamos un combustible que no es el que nos vendió el Estado”, agrego.
La semana pasada, el programa Mesa Redonda sugirió la informal convocatoria al paro ante los comentarios de uno de los espectadores, pero de igual manera los conductores de dicho programa recordaron que en Cuba las huelgas laborales están prohibidas y que en más de medio siglo la oficialista Central de Trabajadores de Cuba (CTC) nunca ha convocado a tales actos de protesta.
Mientras, los transportistas intentan dar batalla y recuperar la autonomía que han obtenido desde que el trabajo por cuenta propia se autorizó a mediados de la década de los 90 en la isla.
Estas medidas forman parte de un paquete de 20 decretos, resoluciones y normas que se aplicarán a partir del próximo 7 de diciembre, y que según las autoridades, buscan “reordenar” el sector privado. Sin embargo los emprendedores las toman como un impedimento hacia las aperturas económicas que impulsó Raúl Castro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario